martes, 8 de noviembre de 2016

MI HERENCIA GENÉTICA


Recordáis hace un año y medio la avería que tuve en la ITV?, Avería ITV. Pues resulta que la paciencia me vuelve a dar grandes alegrías. En su día tras el monumental enfado por la rotura y la ausencia total de asistencia del seguro, me serené y decidí repararlo rápidamente, para luego iniciar una guerra burocrática con el seguro del coche, que es Pelayo.

El día de la avería me negaron la grúa argumentando que el coche se averió sin tener la ITV pasada (me había excedido una semana), yo le repliqué que no es un coche de uso habitual y que lo saqué del garaje para ir a pasar la ITV y de echo la avería sucedió allí. Pues no hubo manera y me trataron como un "número", puedo reconocer que de manera estricta podrían tener razón (aunque no está escrito de manera explícita en las condiciones particulares del seguro como si lo está por ejemplo el ir bebido), pero también debo decir que tras los números hay personas y en mi caso con un historial de siniestros impecable, esto y las circunstancias de la avería debería hacer reflexionar a la persona que estaba al otro lado del teléfono o a sus superiores pero la verdad es que no lo hizo. Conclusión, debí gestionarme yo la grúa y pagarla.

Al día siguiente inicié la guerra contra el Seguro, lo que me hizo encolerizar cada vez que debía hablar con ellos por teléfono, son de las organizaciones menos humanas de la sociedad actual con la que estamos condenados a relacionarnos, no en vano son primos de los bancos.

Inicialmente sólo le iba a reclamar el costo de la grúa pero después de tanto enfado añadí también el incumplimiento de la cláusula 1:24:72 de Pelayo por no proporcionarme una grúa antes de 1 hora. La guerra de despachos y llamadas telefónicas fue lenta pero continua, debí utilizar otra vez mi mejor arma, la paciencia y la perseverancia, mucho le debo yo a esta herencia genética. Después de 4 meses desde la avería, me daban la razón en reintegrarme el costo de la grúa pero lo del seguro gratis por incumplimiento de la cláusula 1:24:72 nada de nada, no obstante no me rendí y seguí erre que erre como Paco Martínez Soria, fue a los 6 meses cuando me llamaron por teléfono para decirme que aplicaban la cláusula y por lo tanto el seguro del próximo año me saldría gratis, no me lo creí pues de los seguros sólo me creo lo que está escrito, pero al poco me llegó una carta certificándolo. Aun así es ahora cuando lo festejo pues ya pasó en año y EFECTIVAMENTE, EL SEGURO ME HA SALIDO GRATIS, HURRA!!! BRAVO!!!

 

Adjunto carta y recibo en el que me indican que me sale gratis.


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