Por este motivo y aprovechando que se desmontaría parte del coche creí necesario equiparlo con un kit de antiincendios.
En un principio me dijeron que algunos coches lujosos llevaban en la guantera unas bengalas a base de potasio que al partirlas extraían el oxígeno de la zona donde se aplicaran y por ello el fuego se extinguía, además no dejaban residuos sobre la mecánica. Intenté ver donde las vendían y cuanto costaban pero la búsqueda fue infructuosa.
Finalmente decidí instalar un equipo de extinción tipo competición, de accionamiento telemanual con tuberías y difusores a los puntos más susceptibles de iniciar un fuego, también lo elegí del tipo limpio, es decir, en OMP lo llaman Ecolife y con él los residuos tras la aplicación son mínimos y nunca dañan la zona de aplicación.
En la foto se puede ver este equipo, sólo me falta el cable de accionamiento desde el habitáculo que he olvidado comprarlo. Espero no usarlo nunca pero creo necesario instalarlo para preservar la integridad del coche.